miércoles, 5 de marzo de 2014

Era inteligente, ingenioso. Era divertido o al menos a mi me divertía. Pero a pesar de todo eso, lo que más me gustaba de el era su sonrisa. Eso es todo. Si algún día me toman por la espalda dos hombres y me llevan a un lugar oscuro con una lamparita colgando el techo yo diré eso. Yo diré que era su sonrisa y eso es todo. Eso era todo.

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